24 de octubre de 2015

Rosa, como la puerta que me encierra en esta oficina, asi tengo ganas de pintar esta historia, rosa, un rosa empalagoso, como esos dulces que masticas y masticas y nomas no se acaban pero que disfrutas hasta el ultimo gramo de azucar que te proporcionan.
Si, asi tengo ganas de describir hoy un sentimiento que despues de mucho, no se habia asomado por estos rumbos, y que conste que no es porque Diciembre este presente pintado a todo mundo de rojo y blanco, esta vez fue el ambar de la cerveza, lo pintoresco de la conversacion y la negrura de la noche.
Esta combinacion extraña de colores fue lo que me ayudo a despertar y poder ver por fin las bondades que me rodean, el verde de mi ingratitud hoy se fue por fin y dejo camino abierto para este rosa que me llena de nuevo, como cuando era adolescente, como cuando aun presumia de ser feliz.
Rosa, ese es el nuevo color y lo empiezo a ver por todas partes, un rosa palido, lleno de amor y ternura me dio los buenos dias esta mañana mientras me envolvia en un regazo tibio, se que hoy por la noche un rosa mexicano y festivo me espera con mis amigas.
Rosa por todos lados.